Negociación: penúltima competencia imprescindible en la 4ª revolución industrial
En el punto álgido de un conflicto nos parecemos más a nuestros enemigos cuanto más creemos distinguirnos de ellos", decía Dietrich Schwanitz. Un pensamiento que recoge de manera certera la tendencia del ser humano a alejarse de la empatía y la negociación racional para refugiarse en ese obstinado e improductivo "tener razón". Un empeño que, cada vez más, tiene menos cabida en nuestra era.
Seguir leyendo en El Economista